¿Estás arrancando una empresa o formalizando tu negocio? Entonces es hora de hablar de impuestos. Sí, los que tienes que pagar para que tu empresa esté al día con el Estado y pueda funcionar sin problema.
Tener claros los impuestos que debes pagar, te ayudará, como emprendedor, a saber cuánto tienes que vender o producir para llegar a un punto de equilibrio. Es decir, para llegar a ese momento en el que vendiste lo suficiente para recuperar inversión, pagar impuestos y obtener una ganancia para ti y los que trabajan contigo.
¿Cuáles son? Esta es la lista de lo que todas las empresas tienen que pagar.
IVA
El IVA o impuesto agregado lo debemos pagar todos los ciudadanos cuando compramos cualquiera de estos productos o servicios.
Si tu empresa ofrece uno de estos productos/servicios,debes cobrar IVA, que generalmente es del 19%. Pero ojo: esta plata del impuesto no es para ti, sino para pagarle al Estado. Guárdalo en un Colchón de Nequi y no lo gastes hasta que tu contador te diga que es tiempo de pagarlo.
Retención en la fuente
FCada año, miles personas que ganan más de $3.152.000 mensuales en el año anterior, deben pagar un impuesto de renta. Pero el Estado generalmente necesita liquidez mensual o tener plata disponible para gastos e inversiones, y le pide a las empresas que retengan o saquen un porcentaje de lo que l les pagan a sus trabajadores. D
El valor o porcentaje de este impuesto, depende del tipo de profesión y el oficio que desempeñen los trabajadores. En tu caso, tu contador te dirá cuánto debes retener por cada proveedor o colaborador de tu negocio.
ICA
Este impuesto se te cobra básicamente cuando tu empresa realiza cualquier actividad comercial en Bogotá.
Renta
El impuesto de renta implica que tendrás que pagar el 30% por ciento de tus ganancias netas al Estado. ¿Cómo así? Si ganaste $10.000.000, luego de los pagos que tuviste que hacer por costos de materia prima, servicios y proveedores, tendrás que darle a la DIAN $3.000.000.
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También existen algunos impuestos especiales que tendrás que pagar, de acuerdo con el tipo de empresa que tengas. Por eso, es muy importante que tú y tu contador hablen claramente. Esto te permitirá saber y proyectar cuánto debes vender para estar a paz con tus proveedores, contigo mismo y con tu socio mayor: el Estado.